Las banderas pueden también ser merchandising ¿Por qué no?

Una bandera también es un producto promocional. Normalmente asociamos las banderas a temas políticos (países, partidos políticos, sindicatos, manifestaciones…) o deportivos (clubs y equipos, competiciones…).

Pero hay muchos otros usos para las banderas. Uno evidente es el merchandising de cine, televisión y similares, desde la bandera de las casas Stark o Lannister de Juego de Tronos, a las de Gryffindor, Hogwarts y similares en Harry Potter, la de Moderdonia de La vida moderna y tantas otras.

Y a nivel empresarial, la bandera no sólo puede decorar la sede de la empresa. Es algo que une. Se puede poner en la fachada del hotel cuando se hace una reunión de ventas, como si fuese un país más.

Se puede llevar cuando se realice una salida como la de PANGEA The Travel Store. Se puede dar a deportistas a los que patrocines para que la luzcan cuando compitan.

O se puede usar como símbolo de pertenencia, como la de DHL Parcel España, dentro de una campaña entre los trabajadores y colaboradores, reivindicando que son esenciales, y que que se ha convertido en un challenge entre ellos en las redes sociales.

Un artículo totalmente personalizable.

Un artículo que une.